"¿Por qué escribir es importante? Principalmente por vanidad, supongo.
Porque quiero ser esa persona, una escritora,
y no porque haya algo que yo deba decir." (Del Diario de Susan Sontag)
A muchos les ha pasado: la actividad de blogger surge a veces como un ejercicio de descontracturación.
Antes del
blog, yo, personalmente, solía imponerles secreto a los textos que escribía, y no me decidía a mostrarlos hasta no tener la “convicción”, (que casi nunca llegaba) de que eran medianamente aceptables. La herramienta del cuaderno virtual me permitió relacionarme de otra manera con la escritura.
El blog llegó a ser ese espacio que permite la inestabilidad. La posibilidad de exponer ideas generadas a veces de modo espontáneo. La tranquilidad de que se puede, si se quiere, quitar de circulación aquel texto que no nos termina de convencer, o efectuarle correcciones y volver a publicarlo. Y ni qué decir de la expansión de la capacidad de difusión. Para no hablar de una especie de "desprendimiento" que tiene el escritor respecto de los textos de su autoría.
La cuestión es que pareciera que el blog está modificando nuestra idea de escritura.
Sí señores, el uso del blog, trae colas. Veamos algunas:
1- Mixtura entre lo oral y lo escrito.
Platón adjudicaba a los textos escritos cierta
fijeza, y por ende la incapacidad de responder a los interrogantes del potencial lector. Esto es lo que dice en el
Fedro:
“Si un escrito se ve insultado o despreciado injustamente, tiene siempre necesidad del socorro de su padre, porque por sí mismo es incapaz de rechazar los ataques y de defenderse”.
No es casual que este pensador eligiera el diálogo (forma que intenta reproducir la oralidad), para difundir sus ideas.
de modo que, si lo que antes diferenciaba la escritura de la oralidad era entre otras cosas:
- carácter fijo vs. fluidez,
- permanencia en el tiempo vs. inmediatez,
- diferentes formas paratexturales: tipografía e ilustraciones vs. gestos y entonación, etc.,
Convengamos en que
en los blogs (entre otros exponentes textuales virtuales)
estos rasgos se han mezclado, lo que ha dado como resultado un lenguaje escrito menos “encorsetado”, digamos. Esta especial fluidez es pariente de los textos escritos otrora en la intimidad, tales como el
diario íntimo y la
carta personal. De esta última el blog ha heredado además la capacidad de feed- back inmediato.
2-
La posibilidad del comentario.
Si bien existen los blogs “cerrados” para el acceso exclusivo de su autor, el aporte específico del blog a nuestra relación con la escritura es la
fácil e inmediata interacción. El comentario que se instala en nuestro post nos aporta puntos de vista, críticas, exclamaciones de adhesión o rechazo, o simplemente invitaciones a los propios blogs o a sitios de quienes eventualmente entraron en el nuestro.
Por supuesto, los comentarios pueden ser “moderados” y hasta “eliminados” por el dueño del blog. Eso atañe a la exposición de los mismos como parte de nuestra “obra”. (Al comentar, el comentarista se vuelve parte de nuestro post, éste lo captura). Pero hay que reconocer que este intercambio inmediato era bastante difícil en la cultura del libro.
3- La relación sensorial con el escrito no es la misma de antes.
Hace unos años, cuando era miembro de la revista
El Fabulario, tuve la oportunidad de dialogar con la
autora de un proyecto que básicamente contrasta con este fenómeno del blog. El proyecto era Ediciones del Agua, una editorial salteña que pretendía subrayar la corporeidad de la palabra poética desde un tratamiento artístico del papel en el que se imprimía la obra. El papel se transformaba así en materia integrante de la escritura. Con el recurso del papel artesanal generaban páginas únicas e irrepetibles.
Resulta significativo que esta propuesta tan radical surgiera en el 97, pisándole los talones al surgimiento de su antítesis,
el blog.
La apuesta por la materialidad de la palabra subrayaba lo que en realidad se estaba perdiendo: una relación sensorial expandida con el libro y con el lenguaje, en una época en la que el libro comenzaba a desmaterializarse para volverse virtual.
Así, esa relación con los libros y cuadernos que implicaba lo táctil, lo visual y por qué no lo olfativo se reduce con los blogs al plano eminentemente visual.
Claro que, explayarse en la materialidad del blog queda para otro post.
4- De lo íntimo a lo éxtimo.
Con el blog, la intimidad puede ser puesta a disposición del público de manera veloz, sin mediaciones de intermediarios (editores, libreros).
Paula Sibilia, en su libro
La intimidad como espectáculo, dice del blog:
“La mayoría sigue el modelo confesional del diario íntimo o mejor dicho: diario éxtimo, según un juego de palabras que busca dar cuentas de las paradojas de esta novedad que consiste en exponer nuestra intimidad en las vitrinas globales de la red.” (o. cit. pág. 16)
Por supuesto, habría que ver cuánto de ficción hay en esa
exposición de lo íntimo.
5- Revolución en nuestras coordenadas espaciales instituidas para la lectura.
El blog tiene la posibilidad del
link. El laberinto que obsesionó a Borges, esa idea de construir un
“laberinto de símbolos”, (
El jardín de los senderos que se bifurcan es un ejemplo de esto), un relato rizomático con historias paralelas, con finales alternativos y simultáneos, se presenta en la hipertextualidad del blog.
Las posibilidades de exceder la linealidad impuesta por un lenguaje occidental cuyas coordenadas son “de derecha a izquierda” y “de arriba hacia abajo”. Ahora es el “adentro”, “detrás”, “debajo" (en el sentido de oculto). El retroceso, la expansión de lo que está comprimido.
Nuestra capacidad perceptiva se está configurando a esta nueva modalidad de lectura.
6- Las posibilidades de corrección: la no definitividad.
El blog bien puede ser un sitio de experimentación, un laboratorio. Tiene el modo de lo urgente, una especial vivacidad, la necesidad de constante atención y renovación. Estas posibilidades aportan cierta tranquilidad al escritor de blog. Hay una espontaneidad en la expresión de ideas.
7- Cuestiona “el aura” de la “autoría”.
Cuando
Walter Benjamin (La obra de arte en la era de su reproductibilidad técnica) hablaba a mediados del siglo XX de la pérdida del
aura de las obras de arte, vinculaba el fenómeno con la cultura de masas y el uso de recursos técnicos que permitían la reproducción, entre otras cosas.
En la era de la reproductibilidad técnica, lo que podría haber tenido una presencia irrepetible adquiere una presencia masiva. Esto no es novedad en literatura: se viene dando desde la invención de la imprenta. Pero Benjamin se detiene en un fenómeno que involucra a la producción de escritos:
la desaparición gradual de la distinción entre autor y público. Si bien en un principio los lectores excedían significativamente en número a los escritores, desde la expansión de la prensa escrita el número de lectores que se volvieron escritores - si quiera ocasionales - se multiplicó. “El lector está siempre dispuesto a pasar a ser un escritor”, decía Benjamin.
Ahora bien, el blog es un producto de la era de la reproductibilidad técnica.
El blog abre diques de posibilidades para los incipientes escritores, gracias a lo sencillo que es abrirlo y escribir en él. Así el blog colabora con la pérdida del aura de la obra literaria, en especial en lo referido a la autoría. En los siguientes aspectos:
-
Cualquiera que tenga el recurso a mano puede ser escritor de blog. Hoy en día, es más fácil escribir en un blog que publicar libros o lograr que la prensa difunda nuestras ideas.
- Dispuesto como está para todo el que quiera acceder, tiene implícita la posibilidad de que su contenido sea copiado, reproducido, apropiado. La autoría se disuelve.
Esto no es solo estéticamente importante, sino que también tiene interés político. Porque estamos ante otro recurso digital que promueve lo que
Mercedes Bunz llamaría “la utopía de la copia”. Según esta autora, las utopías, que parecían estar apagándose como programa político, reaparecen hoy en el discurso en torno a lo digital. El recurso de la
copia idéntica es un resplandor de la utopía (Libro: La utopía de la copia)
De este modo, la autora ve cómo el recurso de la copia idéntica ataca la lógica dominante de la economía demostrando que las cosas funcionan de otro modo, cuestionando así el orden acostumbrado y supuestamente natural.
El blog también, entonces, puede ser trinchera de ataque del orden establecido en el que se apoya el copyright. Estamos en la era de la fragilidad del derecho de autor.
La pregunta es si esta situación también influye en el tipo de escritura que el autor de blogs presenta para su difusión masiva vía Internet.
(¿Se deja para el blog lo que no se incluiría en el libro?)
En general,
algunos escritores argentinos se han valido de la posibilidad de difusión que el blog permite para divulgar una serie de escritos, como paso previo a la publicación de un libro.
Esto quiere decir que es posible complementar dimensiones de publicación. ¿Preferible que sobre y no que falte?
Apostillas: (Otros posteos acerca del blog)
Mairal: El blog y la ansiedad.
Cippolini: Escritores con software inmerso...
Cristal: El escritor se explica en un blog: 20 razones